9 de Abril 2010
Dancing 01
Me encanta bailar.
Lo que pasa es que lo hago con cierta torpeza. O sea, sé moverme al ritmo de la música y durante mis años de after hours, mi amiguete Pau me enseñaba a deeeeeslizaaaaaarme siguiendo la múuuuuusiiiiiiica de temazos como el Missing de Everything but the girl, versión Todd Terry, bajo la sombra de Drag Queens que no sé-cómo-demonios-bailaban-encima-de-esas-plataformas; pero me queda mucho por aprender. ^__^
Por eso, contagiado del ambiente canalla nocturno noventero, mi mujer me dice, cuando montamos una coreografía con las niñas, que mi forma de bailar tiene reminiscencias muy... gays. Es lo que tiene dejar que la música fluuuuuya.
Trabajo con música casi 11 de las 12 horas que me paso en el ordenador o en la mesa de dibujo. Y bailo. ¿Cómo puedes estarte quieto cuando suena el While the Earth Sleeps de Peter Gabriel y Deep Forest?
A Robert Redford le pasa algo parecido en Legal Eagles (1986).
Elimino tensión y, cuando estoy de buen humor, me gusta celebrarlo explorando niveles de volumen más allá del 4 o el 5, algo que no se puede hacer cuando las niñas están en casa. No importa si es Depeche Mode, Judas Priest, Morrisey o Tom Waits (probad de dejaros llevar con el Hang on St. Christopher a toda pastilla). Eclecticismo.
Pero en el cine, como en las persecuciones, no suelen verse buenas coreografías. Mouline Rouge, lo siento, pero me parece un mareo y un despropósito (no las canciones, sino las escenas de dancing).
Hay momentos de bailoteo cinéfilo que marcan. ^___^
Me gusta bailar.
Hey, ¡Michelle Pfeiffer se mueve como Stevie Nicks! (Married to the Mob, 1988)
Supongo que "Grease 2", después de todo, le dejó huella :D
Escrito por: KalEl el Vigilante a las 12 de Abril 2010 a las 12:39 PM